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¿PARA QUÉ QUIERES UNA PAREJA? Buscas compañía para calmar tu miedo a la soledad. También esperas que te quieran para suplir tu falta de amor. Y mientras, fantaseas con la idea de volverte a drogar de enamoramiento. Estás totalmente convencido que tu vida solo gozará de sentido si la compartes en pareja. Se trata de una convención tan aceptada e integrada en el inconsciente colectivo que la das por verdad absoluta. Da igual lo que te digan o lo que te cuenten. Simplemente mira a tu alrededor. Muy pocas parejas son felices compartiendo sus vidas. Cada vez que te encuentres pensando del mismo modo en que lo hace la mayoría, es fundamental que hagas una pausa y te tomes tu tiempo para reflexionar. ¿Dónde está escrito que tengas que compartir tu vida con otra persona? ¿Acaso es mejor que vivir sin pareja? Todo depende de quién seas tú y de cuáles sean tus auténticas necesidades y motivaciones. Recuerda que eres único. Solo tú puedes saber para qué tipo de relación estás hecho. Dete

ELIJO UNA PAREJA COMPATIBLE No quiero forzar ni atar una relación. No la necesito para ser feliz, sino para crear y compartir las experiencias de la vida. No quiero una pareja ideal ni perfecta, no quiero una pareja que me complemente, ya estoy completo. Elijo una pareja compatible, y aceptarla tal y como es, que no me quiera cambiar, porque el cambio debe venir solo. Quiero una pareja para acompañarnos en nuestro crecimiento y caminar juntos. Una pareja con valores, pero que no valore más las cosas que la propia relación. No quiero una pareja a la que salvar, ni la necesito para que me salve. Quiero una pareja que sea libre para elegirme , y sea libre para marcharse. No necesito cubrir las expectativas de nadie y que nadie cubra las mías. No quiero a nadie que me necesite para ser feliz, sino que sea feliz a mi lado sin necesitarme. No quiero una pareja con limitaciones, quiero una pareja que, aunque tenga miedo, sea lo suficientemente valiente para decir: “Vamos ade

DESAPEGO Acto más elevado del amor incondicional. Duele, duele mucho, duele porque hay que soltar lo que amas, hay que dejar ir. Ese dolor es mental y causa sufrimiento al ego , por el temor de la posible pérdida de una posesión que no existe, que no es real, es ilusoria, porque no podemos poseer a nada ni a nadie. No nos pertenecen ni los hijos, los padres, los amigos, la pareja… Son seres libres e independientes, con su propio camino por recorrer, igual que nosotros. Por eso no se puede subyugar la felicidad de unos hacia los otros: Si no eres feliz tú solo, no lo serás con nadie. El apego es el controlador del tiempo que no te permite vivir en el presente, ya que te ancla al pasado o al futuro. Sin embargo, el desapego te mantiene aquí y ahora. Desapego es soltar al otro, sabiendo, que pase lo que pase, tú vas a estar bien. Y puede doler mucho, porque nos enseñaron que podíamos poseer todo tipo de cosas, hasta ser dueños de seres humanos y controlarlos. La independencia afe